La polémica en torno a las sedes de las próximas Copas del Mundo sigue al rojo vivo. Este lunes, la cuenta de de Twitter de Joseph Blatter, presidente de FIFA, así como la del propio organismo, fueron hackeadas por un grupo sirio.
Las alarmas se encendieron cuando FIFA publicó un supuesto tweet, en el que se anunciaba el despido de Blatter al frente del organismo, debido a las acusaciones de corrupción que pesan en su contra.
“Se ha decidido que el presidente Sepp Blatter dé un paso al costado, por los cargos de corrupción en su contra”, publicó la cuenta de FIFA, ante la sorpresa de propios y extraños.
Posteriormente, en la cuenta de Blatter también salieron varios tweets, en los que aceptaba que había aceptado dinero de los qataríes, a cambio de darles la sede del Mundial de 2022.
“¿Y qué si acepté dinero del príncipe de Qatar? También tengo que llevar el pan a casa”, decía un tweet. “El emir de Qatar es la persona más generosa que he conocido en mi vida”, rezaba otro.
Después de varias ‘confesiones’, el grupo Syrian Electronic Army se adjudicó el hackeo de ambas cuentas, asegurando que ellos tenían “la verdad” acerca de todo lo que rodea a la designación de la Copa del Mundo de 2022.
Cabe recordar que Siria fue descalificado de la eliminatoria rumbo a Brasil 2014, debido a la alineación de George Mourad, quien ya había representado a Suecia en 2005.
Los hackers aseguran que dicha decisión fue una cuestión meramente política, pues los qataríes le pagaron al menos 1.5 millones de euros a Blatter para favorecer a ciertas selecciones en dicha fase, sin contar la compra de votos para recibir la sede del mencionado Mundial.
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